Autónomos ‘arrepentidos’: volver a trabajar por cuenta ajena

por Jesús Martínez
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El autoempleo es una opción que está recuperando más peso en el mercado español después de una época de crisis oscura e inmovilista. El número de altas y bajas de autónomos ha variado mucho en los últimos cuatro años; de acuerdo con el portal Infoautónomos, el mejor momento para el empleo por cuenta propia llegó en 2008, cuando había prácticamente tres millones y medio de autónomos en España.

Hoy, seis años de crisis después, estos trabajadores constituyen aproximadamente el 18% de toda la población ocupada, algo más de 3.100.000 personas; la gran mayoría cotizan en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) y 195.000 lo hacen en el régimen agrario. Además un 13% de los autónomos tienen empleados a su cargo: esto supone que han generado cerca de 800.000 puestos de trabajo.

Estas cifras indican que unos 400.000 autónomos han sucumbido a la recesión pese a que medidas como la famosa ‘tarifa plana’, aprobada en 2013, y el escaso movimiento en el mercado laboral animó a muchos españoles a emprender. Desgraciadamente hay un porcentaje bajo de ‘supervivientes’ en el largo plazo.

En el peor momento de la crisis, en 2012, hubo 44.000 bajas en el RETA en sólo un año. Hoy hay cientos de autónomos que abandonan porque sus proyectos se han agotado, pero también porque quieren volver a trabajar por cuenta ajena.

Quienes animan y defienden el emprendimiento mencionan la libertad que da la autogestión, el ser tu propio jefe, etc. ¿Por qué alguien querría volver a ser asalariado, tener jefe, horarios fijos…? Desde Fintonic te mostramos algunas razones:

– Ser autónomo en España es una opción cara y de alto riesgo. Los trabajadores por cuenta propia en nuestro país lo tienen mucho más complicado que en otros países de la Unión Europea. Aunque hay ayudas como la ya mencionada ‘tarifa plana’, éstas no duran para siempre: el mínimo que paga un autónomo cada mes es de unos 260 euros, a lo que hay que sumar el 21% de IVA y las retenciones. Y esto se paga cobres o no.

– Los autónomos cobran pensiones de unos 500 euros menos que el resto de trabajadores. Y además no están protegidos por una cobertura por desempleo como los asalariados, a no ser que paguen (y mucho) por ella. Si un autónomo tiene un accidente o sufre una enfermedad, es muy difícil que pueda disponer de una baja al uso, como las de cualquier trabajador por cuenta ajena. Si no trabaja, el autónomo no cumple con su jefe, que es él mismo, así que será mejor que un apendicitis no se cruce en su camino. Trabajar durante una convalecencia es algo que a un asalariado no le preocupa en exceso.

– La cara oculta de trabajar sin horarios. Los autónomos no entienden de vacaciones, puentes, fines de semana… Y no es una leyenda urbana. Están disponibles las 24 horas, 365 días al año. Para un asalariado es más fácil descansar o dedicar su tiempo a una afición o a su familia que para un autónomo.

– Facturas, facturas, facturas. Si eres asalariado, la empresa se encarga de tus números, de tu cotización a la Seguridad Social, de tus altas y bajas en el mercado laboral; tú, sólo de firmar la nómina si está todo correcto. Cuando eres autónomo, eres también un gestor, con toda la responsabilidad y la burocracia que eso conlleva (impresos, modelos, visitas a Hacienda). Si eres de los que se atreve a llevar sus propios números, puedes encontrar algunos consejos útiles en este antiguo post de Fintonic. Tal vez así conceptos de IVA o IRPF dejen de ser un quebradero de cabeza.

– Dejar atrás la soledad y abrazar el trabajo en equipo. El autónomo está solo, a veces demasiado. Aunque trabajar en casa, sin horarios, tiene sus ventajas, los inconvenientes son muchos: las horas extra no se cobran y no puedes apoyarte en otros compañeros o departamentos, algo que exige mucha autodisciplina. Si cada vez más compañías grandes y pequeñas se esfuerzan porque haya un buen ambiente de trabajo entre compañeros es porque está demostrado que en trabajando en equipo se rinde más.

– El autónomo nunca asciende. Un trabajador por cuenta propia ya ha tocado techo, al menos a un nivel organizativo convencional. Si aumenta su volumen de encargos y puede permitírselo, quizá contrate a alguien, pero su cargo de 0 a 20 o 200 empleados siempre será el mismo. Y aunque uno de sus clientes sea una empresa ‘estrella’ del sector, la relación no es tan fuerte entre colaborador y cliente como entre compañía y asalariado.

– Y por último, el as de todos los ases: la estabilidad. El mercado laboral español está mejor en 2015 que hace uno o dos años, pero el entorno es mucho más hostil cuando estás solo ante el peligro. Aunque un contrato no es sinónimo de inmunidad, una relación contractual con tus pagadores te hace sentirte más seguro; sabes que, de no torcerse mucho las cosas, vas a trabajar en el mismo sitio el mes que viene. Un autónomo siempre vive en la sospecha.

No importa qué motivo hay detrás de la decisión de abandonar el autoempleo para desarrollarse profesionalmente al amparo de una empresa, sea del tamaño que sea, siempre que hayas pensado en las consecuencias.

Independientemente de la opción que decidas, es más que recomendable que mantengas tu economía en buena forma; y como sabemos que de tiempo no anda uno sobrado, te recomendamos el uso de la aplicación de Fintonic para gestionar las cuentas de todos tus bancos y tarjetas sin hacer nada, ¡automáticamente! La aplicación además ordenará por categorías todos tus gastos automáticamente – lo que gastas en gasolina, en restaurantes, etc -, y te avisará al móvil cada vez que ocurra un movimiento extraño como el cobro de un recibo duplicado, comisiones bancarias, saldos bajos en cuenta evitando penalizaciones del banco, etc.

Gracias a Fintonic podrás dedicar el tiempo que no te sobra a cosas realmente importantes.

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6 comments

ShowMeTheViral.com 14 de enero de 2019 - 11:46

Pienso que tiene más razón que un santo. Verdades como puños, emprender no es nada fácil. Y hacer negocio en un momento dado no quiere decir que se tenga que ser para toda la vida. Hay veces que las cosas tan pronto como llegan se van. Y siempre hay que tener plan B. Saludos

Fintonic 14 de enero de 2019 - 12:16

Gracias por tu comentario!

ShowMeTheViral.com 28 de marzo de 2015 - 14:51

Pienso que tiene más razón que un santo. Verdades como puños, emprender no es nada fácil. Y hacer negocio en un momento dado no quiere decir que se tenga que ser para toda la vida. Hay veces que las cosas tan pronto como llegan se van. Y siempre hay que tener plan B. Saludos

Fintonic 15 de abril de 2015 - 10:32

Gracias por tu comentario!

Pilar 4 de mayo de 2020 - 22:25

Hola buenas noches, tengo una pregunta q no sé si me podréis contestar. Fui trabajadora Autónoma durante 1 año y seguidamente trabajé por cuenta ajena 1 año también. Ahora para solicitar el paro me cuenta el año q trabajé como Autónoma o solo el año trabajado por cuenta ajena?? Gracias!!

Fintonic 6 de mayo de 2020 - 12:59

Hola Pilar, gracias por pasarte por nuestro blog. En esta ocasión no tenemos una respuesta para tu pregunta al estar muy relacionada con asuntos laborales, si tienes cualquier otra duda referida a seguros, coberturas, ahorro, financiación… puedes mandarnos un correo a ayuda@52.210.119.160

Muchas gracias y que pases feliz día!

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