1. Tonos terrosos y cálidos
Los colores otoñales clásicos vuelven este 2024, pero con un enfoque más vibrante y contemporáneo. Tonos como terracota, arcilla, ocres y mostaza se están imponiendo en paredes, textiles y muebles, creando un ambiente cálido y acogedor. Estos colores no solo evocan el espíritu de la temporada, sino que también aportan una sensación de confort, perfecta para los meses más fríos.
2. Materiales naturales y sostenibles
El enfoque en la sostenibilidad sigue fuerte este otoño. Materiales como la madera reciclada, el mimbre, el lino y el algodón orgánico están ganando protagonismo. Además, los muebles hechos a mano y los accesorios artesanales están en tendencia, ya que aportan un toque único y sostenible al hogar. Incorporar materiales naturales no solo es una elección ecológica, sino que también añade textura y profundidad a cualquier espacio.
El enfoque en la sostenibilidad sigue fuerte este otoño. Materiales como la madera reciclada, el mimbre, el lino y el algodón orgánico están ganando protagonismo. Además, los muebles hechos a mano y los accesorios artesanales están en tendencia, ya que aportan un toque único y sostenible al hogar. Incorporar materiales naturales no solo es una elección ecológica, sino que también añade textura y profundidad a cualquier espacio.
3. Diseño multifuncional
Con el auge del trabajo desde casa y el aumento de actividades que se realizan dentro del hogar, los espacios multifuncionales se han convertido en una tendencia esencial. Los hogares modernos ahora incluyen áreas que pueden transformarse fácilmente según la necesidad: desde una sala de estar que se convierte en oficina, hasta una cocina que sirve como espacio de reunión. Muebles modulares y soluciones de almacenamiento inteligentes son clave en estos diseños.
4. Colores vibrantes
Aunque los tonos neutros dominan muchos espacios, los toques de color están ganando terreno como una forma de añadir personalidad a los interiores. Colores vibrantes como el azul cobalto, el verde esmeralda y los tonos mostaza están siendo utilizados en detalles decorativos, paredes de acento o incluso en muebles principales, dando un toque de energía y modernidad a los hogares.
5. Texturas acogedoras: lana y terciopelo
El otoño es sinónimo de calidez, y las texturas juegan un papel fundamental en esto. Materiales como la lana, el terciopelo y las pieles sintéticas están siendo muy utilizados en cojines, mantas y alfombras. Estas texturas no solo aportan confort, sino que también dan una sensación lujosa y acogedora a cualquier estancia, perfecta para relajarse durante los meses fríos.