Los seguros están llenos de posibilidades, pero también pueden estar llenos dolores de cabeza, si no se tiene claro lo que se quiere y lo que se puede exigir. A la hora de contratar un seguro, aunque te resulte una tarea ardua y aburrida, es vital que conozcas exactamente lo que te cubre y lo que no. Especialmente en los seguros del hogar es muy importante que sea minucioso y analices y evalúes todo lo que necesitas y la compañía puede ofrecerte.
Los seguros del hogar están pensados para ofrecer tranquilidad al tomador. Es precisamente gracias a este interés por lo que cada vez más empresas deciden ampliar sus coberturas como método de competitividad y atracción.
El problema es que el mundo de los seguros ha crecido tanto que cada vez son más las dudas que surgen entre aquellos que buscan contratarlo. Si estás pensando en contratar un seguro o cambiar el que ya tienes, sigue leyendo, porque vamos a resolver las cuestiones más comunes para que se lo más fácil posible.
¿Por qué debo contratar un seguro de hogar?
Tu casa es muy importante. Es el lugar donde vives, tienes tu espacio, donde tienes tus pertenencias… Por ello es importante que se encuentre bien protegido ante posibles imprevistos.
Piensa que necesitas un seguro que te cubra en situaciones en las que, por ejemplo, se te rompe una cañería y mojas al vecino de abajo. O imagina que un día de lluvia y viento tienes la mala suerte de que un árbol caiga en tu ventana. Necesitas un seguro de hogar que se haga cargo de los desperfectos que sucedan por motivos meteorológicos.
Todos los daños que sucedan en tu casa o causes a un tercero, si no tienes un seguro contratado deberás hacerte cargo tú, lo que podría suponerte una gran suma de dinero. Por ello, tener un buen seguro del hogar te ahorrará muchos disgustos y te aportará tranquilidad.
¿Qué me cubre un seguro de hogar?
Esta suele ser la primera pregunta que le surge a cualquier persona que se esté planteando contratar un seguro de hogar. Desde Fintonic vamos a intentar resolver las dudas más frecuentes para que contrates la póliza que más se adapte a ti.
Por lo general suelen incluir tanto el contenido como el continente. ¿Cuál es la diferencia entre ambos? El continente de refiere a la estructura de la vivienda (techos, paredes, suelos…) y el contenido son los bienes que se encuentran dentro de la vivienda. Aún así, cada aseguradora decide cubrir una serie específica de elementos, por lo que es necesario estudiar a conciencia la póliza con atención para sabe qué es lo que estamos contratando. En cada parte (contenido y continente) se debe especificar, de forma concreta, lo que cubre en caso de siniestro.
Preguntas más comunes
- Si cambio mis muebles, ¿debo avisar al seguro? Según la Ley 50/1980 de Contrato de Seguro, sí, es obligatorio hacerlo. Es necesario que la compañía esté al día de todos los cambios que estemos realizando en la vivienda.
- Si tengo seguro comunitario, ¿necesito un seguro de hogar? Esta puede ser otra de las cuestiones que se plantean a la hora de contratar tu propio seguro. Lo cierto es que lo más recomendable es que contrates el tuyo propio. El seguro comunitario cubre una serie de cosas que no cubre el del hogar. El seguro de la comunidad está enfocado a las zonas comunes del edificio, no a lo que sucede dentro de cada vivienda. Este es el motivo por el que, a pesar de tener contratado un seguro comunitario, es muy recomendable que también contrates tu propio seguro y te ahorres algún que otro disgusto.
- Vivo en un piso de alquiler ¿Quién paga el seguro de hogar? Son muchas las personas que viven alquiladas y, en este punto, vuelven a aparecer dudas sobre a quién corresponde el pago del seguro.
- Antes hemos explicado cuál es la diferencia entre continente y contenido. A pesar de que tener un seguro de hogar no es obligatorio, si es altamente recomendable. El propietario de la casa deberá hacerse cargo del continente. Es decir, puede hacerse cargo de contratar un seguro que cubra cuestiones físicas del edificio: las paredes, los suelos, los techos, las cañerías… Sin embargo, si estás viviendo en esa casa, lo más probable es que tengas tus pertenencias en su interior. Ante un posible robo, el seguro anterior no se haría cargo de tus objetos. Para evitar esta situación, lo mejor que puedes hacer es contratar tu propio seguro para cubrir el contenido de la vivienda. Este seguro tendría que pagarlo el inquilino, en este caso tú, y no el propietario de la vivienda.
Revisa las condiciones antes de contratar el seguro
Si te has decidido y quieres contratar un seguro de hogar, lo primero que debes hacer es revisar las condiciones de cobertura. Como ya adelantábamos es básico para que puedas saber lo que puedes o no reclamar. En las pólizas encontrarás toda la información detallada de las cosas que te cubrirá o no el seguro. Existe una gran cantidad de situaciones que el seguro podría cubrirte: humedades, roturas, robos… pero también hay otras que probablemente no conozcas y que, según en qué casos, pueden venir realmente bien. A continuación, destacamos cuáles son:
- ¿Tienes hijos pequeños? Pues mira con atención las condiciones de tu seguro porque la mayoría tienen un apartado que se conoce como responsabilidad familiar. Éste puede cubrir, por ejemplo, si tu hijo rompe algo en una tienda. La aseguradora se hará cargo de los daños a terceros que hayan sido provocados por cualquiera de los miembros de la familia (que vivan en esa casa).
- Algunas aseguradoras, como Línea Directa, tienen instaurado un servicio de ocio y alcohol. Es decir, sales a tomar algo y la noche se hace larga. Has bebido y no puedes coger el coche. Puedes llamar a tu aseguradora. Una grúa llevará el coche a tu casa y tanto tú como las personas que te acompañen llegaréis a casa en taxi, con los gastos pagados.
- Otros, en cambio, se centran en cuestiones más básicas. Mapfre sabe que no todas las personas son manitas y montar muebles de Ikea no es lo que mejor se les da. Si ésta es tu situación, debes saber que ésta compañía tiene una póliza que ayuda al asegurado con temas de montaje y bricolaje. ¡La ayuda que estabas deseando!
- ¿Vas a viajar al extranjero? Revisa antes tu póliza ya que muchos seguros incluyen la asistencia en viajes. Si, por el motivo que sea, tuvieras que hacer uso de la sanidad de otro país o volver a tu país, la aseguradora se hará cargo de los gastos. Sin duda, una ayuda increíble que te hará sentirte más seguro.
Quiero un seguro, ¿cómo lo elijo?
A la hora de elegir el seguro existe una gran variedad de compañías que pueden adaptarse mejor o peor a tus necesidades y a tu situación. Hay prácticamente tantas posibilidades como casos, así que para que no tengas que hacer estas comparaciones y te eternices para escoger el que más se adapte al tuyo, Fintonic cuenta con un servicio de comparación de seguros. De hecho ¡es más que eso! Investiga por ti entre más de 40 aseguradoras la que más se adapte a tus necesidades, y también mediará con la compañía. Si tienes algún problema o estás pendiente de cobrar la indemnización que te corresponda ¡Tu asesor financiero Fintonic lo hace también por ti!
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